Lotina es consciente de lo poco que tiene este año en el Depor, y lo duro que será este año para su equipo. Ahora bien, también sabe que tiene dos jugadores que le pueden ganar partidos, solamente dos, uno en cada punta del campo como los son Aranzubia y Adrián. El portero se dedica a parar todo lo que le llega, Adrián, el delantero solitario, se dedica a marcar goles, a volver loca a la defensa contraria y a expulsar a sus rivales.
El segundo gol del Deportivo fue un ejemplo clarísimo. Dani Aranzubia, golpea fuerte el balón desde su portería hacia Adrián que se encuentra rodeado de cuatro contrarios en la frontal del área defendida por Iraizoz. Adrián se revuelve, pelea, se marcha con el balón y gol.
Los dos solitos fueron capaces de ganar el partido en San Mamés.
Para quitarnos el mal sabor de boca, como siempre, tocó arrebato en los últimos cinco minutos, pero esta vez...no pudo ser y eso que Iraizoz remató de cabeza un corner, que si no llega a golpear en el brazo pegado de Manuel Pablo, tenia camino de ser el gol del empate.
Iraizoz subió a rematar con ganas, golpeó de cabeza el balón como si fuera el mismo Llorente. En la portería se encontraba Aranzubia...La rivalidad de los dos porteros es grande, muy grande...esta vez, el duelo, lo ganó Dani.
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